Cuando los progenitores deciden finalizar su vida en común, en el caso de que la haya habido, el menor debe quedar bajo la guarda y custodia, de ambos o de uno de ellos. Además, llegada esta situación, los padres tiene diversos deberes como es la contribución a los gastos del menor para su sustento, extremo que debe ser regulado, junto a todos aquellos que interfieran en la vida del menor.

Para ello existen procedimientos de mutuo acuerdo o contenciosos cuyo objetivo es obtener una sentencia que apruebe un convenio regulador o que se pronuncie sobre la guarda y custodia, alimentos y régimen de visitas del menor.